mucho después
de que los mares se esfumaran,
más aún,
tomaran a su cargo
a las viejas orillas,
fue cuando logré ver
que el azar devastaba
las peripecias del camino
detrás de mí
no había más que el intento
de eludir un follaje
abandonado
hoy sé
ya sin dudarlo,
que el tiempo ha ido cercando
con pasiones
la conjunción de los espejos
2010