Cuando nací me pusieron dos lágrimas en los ojos para que pudiera ver el tamaño del dolor de mi gente. Humberto Ak-Abal Entradas relacionadasGregorio pinta la vidalunes 29 junio, 2009SONRISAS DE AFICHEmiércoles 14 mayo, 2014Norma Morandinimartes 19 marzo, 2013 Entrada anteriorEl fuegoSiguiente entradaEl Bar