Ya me desperté
no se qué diferencia
hay entre hoy y ayer.
Todos los días son iguales
las horas diferentes
no han de ser.
Ya nada es especial
desde que te fuiste.
Nunca olvidaré tu cara
tu dulce voz al amanecer
tu ojos negros cual ceniza
de tu nariz la pequeñez.
Lloraré hasta mi última lágrima
gotas saladas no dejarán de caer
rozarán mis suaves mejillas
llegarán hasta mis pies.
¿Por qué ya no estás conmigo?
Una tarde me pregunté
la respuesta fue sencilla
Ahora que lo pienso fui tonta
¿Cómo tu correa solté?
Lo que nos unía se rompió
ese desgraciado mes.
Corriendo te alejaste,
saltando ya no se te ve
¿Por qué te fuiste sin mí?
Querida perrita, volvé.